Ibn Arabi**
19:44
Por
ancilo59
Personajes
0
comentarios
Primeros años Ibn Al-Arabí, conocido en Occidente como Abenarabi, nació en la Murcia islámica el 28 de julio de 1165, en el seno de una familia de notables. A los 8 años su familia se trasladó a Sevilla, donde el joven Abenarabi recibió una completa formación literaria, jurídica y filosófico-teológica, iniciando una carrera política en la que llegaría a ser secretario del gobierno en la ciudad andalusí. Estaba imbuido de una fuerte pulsión espiritualista motivada, en parte, por las influencias tanto de su madre como de su esposa, veta trascendente que se incrementaría por una grave enfermedad que haría peligrar su vida.
Madurez Años más tarde comenzó una largo peregrinaje por todo al-Ándalus, proseguido después por el norte de África (Marruecos y Túnez), El Cairo y Jerusalén. Tras dos años intensamente espirituales en La Meca, escribió Revelaciones de La Meca e inició una nueva ruta que tendría como parada lugares como Anatolia, Jerusalén, El Cairo, La Meca o Bagdad.
Después se trasladó a Damasco, donde compusó en el año 1229 Los engarces de la sabiduría. Allí permaneció hasta que murió el 16 de noviembre de 1240. Allí se conserva su tumba, arropada desde el siglo XVI por una mezquita que el todopoderoso Sultán turco Selim II dispuso erigir en su honor.
Las calles de Murcia vieron nacer a uno de los místicos musulmanes más importantes: Abenarabi, gran pensador y poeta andalusí. Los siglos XII y XIII fueron agitados políticamente, con la reconquista y las cruzadas. Es la época de Al-Andalus y del Imperio de los Almohades, constituyendo uno de sus mayores referentes nuestro personaje, un pensador que en obras como Los Nombres de Dios sentó las bases de una nueva cosmovisión enraizada en el acercamiento individual a la divinidad por medio del estudio y la oración, una mística, o busqueda de la unión con Dios, de la que siglos más tarde beberían San Juan de La Cruz y Santa Teresa de Jesús.
Impacto de sus aportaciones Su doctrina se extendió más allá del mundo árabe por todo Oriente y Occidente, hasta sentar las bases de una escuela de pensamiento original e inédita hasta entonces en el mundo musulmán, al tiempo que dejaba también una pronunciada impronta en el ámbito literario, campo en el que sus ideas influyeron en autores como Dante en la cenital obra La Divina Comedia.
OBRA
Nombre y seudónimos
Abu Bark Muhammad Ibn Al Arabi fue conocido con varios nombres: 'Abenarabi' (en occidente), 'Muhyi al-Din' (vivificador de la fe), 'as-Sheij al-Akbar' (el gran maestro) o Ibn Aflatun (el hijo de Platón).Fuentes
Pensamiento
La extensa producción literaria de Abenarabi comprende todos los campos: filosofía, teología, hagiografías, mística, poética, etc., llegando a ser comparada al corpus aristotelicus, a la de Averroes en el campo del conocimiento o a la de Lope de Vega en el campo literario.
En cuanto a su pensamiento, uno de los aspectos más importantes en el mismo es la consideración de la unidad suprema del Ser. Para él, hay dos categorías del Ser: el que es por sí mismo, y el que es creado.
El más alto conocimiento sobre el Ser, el saber supremo, se alcanza a través de la ciencia gnóstica, la que se ocupa del conocimiento. Porque del otro saber, el que puede ser percibido por los sentidos, se encarga la ciencia.
Establece además una división entre el Ser meramente posible y el Ser necesario, pudiendo identificar en este último caso al Ser con Dios.
Su pensamiento reúne influencias de corrientes neoplatónicas y las tradiciones místicas andalusíes.
Cuenta con una ingente obra literaria que comprende más de 400 manuscritos, y su Tratado de la santidad es una de las grandes colecciones hagiográficas del mundo musulmán.
•ADDAS, C.: Ibn Arabí o la búsqueda del azufre rojo, Editora Regional, Murcia, 1996. •ASÍN PALACIOS, M.: Vidas de santones andaluces: la -epístola de la santidad- de Ibn-Arabi de Murcia, Hiperión. Madrid, 1981. •CRUZ HERNÁNDEZ, M.: Ibn Arabí de Murcia, Academia Alfonso X el Sabio. Murcia, 1968. •DOTOR, S.: Ibn Arabí, musulmán español, Publicaciones Españolas. Madrid, 1965. •PARRA PUJANTE, A.: Abenarabi, Museo de la Ciudad. Ayuntamiento de Murcia. Murcia, 2000. •VV.AA.: Los dos horizontes (textos sobre Ibn Al-Arabí), Primer Congreso Internacional sobre Ibn Al-Arabí (noviembre, 1990). Editora Regional. Murcia, 1992.
regmurcia
0 comentarios: